«La verdad es que no esperaba que se marchara!. Para nosotros era una pieza fundamental y él lo sabía. No entiendo lo que ha pasado.»
Para empezar, él no lo sabía, si lo sabía no te entendía y si te entendía no le compensaba estar en tu empresa. Y no siempre por un tema económico.
Es más habitual de lo que creéis escuchar esta lamentación. Muchos directivos se sorprenden de algunas decisiones que toman sus empleados, ya que al estar centrados en la vorágine de los resultados, de las ventas y de crear una fuerte relación con su cliente, descuidan algo mucho más importante, crear una relación con sus empleados.
Entiendo que los clientes son muy importantes, hablamos del sustento económico de la empresa, de la fuente de ingresos y sostenibilidad de la organización, pero cometemos un error cuando no cuidamos antes a nuestros empleados, que son el corazón del negocio, el mayor activo que tenemos.
Os dejo un par de preguntas para que reflexionéis.
Cuántas veces te reúnes o piensas en lo que necesitan tus clientes? Cuántas veces te reúnes o piensas en lo que necesitan tus empleados?
Qué haces para fidelizar y cuidar a tus clientes? Qué haces para fidelidad y cuidar a tus empleados?
Sabes lo que quiere tu cliente? Sabes lo que quiere tu empleado?
En mi experiencia como directivo y posteriormente como consultor de empresas, no he conocido ningún empleado que no esté dispuesto a dar el máximo de su capacidad cuando se le ha escuchado, se le ha hecho participar en las decisiones de su departamento y en definitiva, cuando se le ha hecho protagonista de su propio proyecto dentro de la organización.
Algunos estarán más interesados en la formación, otros en un horario flexible, otros en estar en contacto con nuevas tecnologías, métodos punteros, a otros les atraerá dirigir grupos de trabajo, otros tendrán el foco puesto en su seguridad económica, etc, pero todos, todos darán el máximo de ellos mismos si conseguimos crear una relación con ellos.
Por tanto, la clave no está en el talento o la motivación del trabajador, a la hora de realizar sus tareas, sino en lo capaces que seamos (como líderes) de conseguir que se comprometan con el proyecto gracias a nuestra vocación de servicio.
Un abrazo y buena semana
Cookies de análisis o medición. Son aquellas que permiten al responsable de las mismas, el seguimiento y análisis del comportamiento de los usuarios de los sitios web a los que están vinculadas. La información recogida mediante este tipo de cookies se utiliza en la medición de la actividad de los sitios web, aplicación o plataforma y para la elaboración de perfiles de navegación de los usuarios de dichos sitios, aplicaciones y plataformas, con el fin de introducir mejoras en función del análisis de los datos de uso que hacen los usuarios del servicio.
Cookies de publicidad comportamental. Son aquellas que almacenan información del comportamiento de los usuarios obtenida a través de la observación continuada de sus hábitos de navegación, lo que permite desarrollar un perfil específico para mostrar publicidad en función del mismo.
Cookies para publicidad de terceros. Son cookies almacenadas por terceras empresas. Nos permiten ofrecer publicidad personalizada fuera de nuestra página web. Si aceptas estas cookies, aceptas que se pueda tratar por terceros tu información y la recabada a través de estas cookies para la realización de un perfil comercial y poder realizar ofertas online personalizadas.